Faltan pocos días para la primavera, período en el que se incrementan los síntomas comunes de un cuadro alérgico. Conoce por qué es importante consultar con un especialista para iniciar un tratamiento adecuado.
Cuando se habla de alergias estacionales, habitualmente es en referencia a la rinoconjuntivitis alérgica, la cual se manifiesta, en general, a través de congestión nasal, romadizo líquido, picazón de
la nariz, los ojos, paladar y garganta.
Si bien puede estar presente todo el año, hablamos de alergias estaciones porque en esta época, en la cual empiezan a polinizar algunos árboles, las malezas y los pastos, estos síntomas aumentan.
“El asma alérgica también se exacerba en esta estación del año y se presenta, casi siempre, con tos seca, sensación de pecho apretado o silbido del pecho”, comenta la Dra. María Angélica
Marinovic, inmunóloga adulto e infantil de Clínica Santa María.
Tratamientos para cada paciente
Lo ideal es iniciar el tratamiento unas dos semanas antes de que comience la temporada polínica, para así evitar llegar al momento en que los pólenes están más altos, con una inflamación de la nariz.
“Generalmente lo primero que se administra es un antihistamínico de segunda generación que son los que no producen sedación y se toman una vez al día. Si no hay respuesta agregamos un corticoide inhalado nasal,
y con eso se reduce la congestión. Si hay mucha picazón de ojos incluimos un antihistamínico ocular”, explica la especialista.
“El error que cometen muchos pacientes es automedicarse con lo que le recomendó algún familiar y la mayoría de las veces es con un antihistamínico de primera generación, los cuales producen mucha sedación,
alterando la etapa del sueño REM, lo que puede repercutir, sobre todo en los niños, en el aprendizaje y en su calidad de vida”, agrega la Dra. Marinovic.
“Acudir a una consulta es lo recomendado, para así conocer el causante de la alergia, evaluar cuál es el tratamiento adecuado, y suministrar el medicamento correspondiente, ya que no todos tienen la misma potencia'', finaliza la inmunóloga.
Con colaboración de la Dra. María Angélica Marinovic inmunóloga de Clínica Santa María.