Un desorden alimentario se caracteriza porque la persona pone el foco de atención en los alimentos y en el peso corporal, lo que la hace llegar a extremos cuando se trata de comer. Tres de los trastornos de la alimentación más comunes son la bulimia, la anorexia y el trastorno por atracón.
A menudo se desarrollan durante la adolescencia o en la adultez temprana y pueden ser muy estresantes y perjudiciales para el bienestar general de quien lo sufre, así como también para su familia. Los efectos sociales incluyen baja autoestima y aislamiento, y pueden causar problemas de salud graves, los que pueden poner en riesgo la vida del joven.
Conoce algunos signos y manifestaciones de los trastornos por atracón, bulimia y anorexia. Si notas que tu hijo presenta alguno de ellos, consulta con su médico. Éste podrá evaluar los síntomas específicos y recomendar la mejor manera de ayudarlo.
•Trastorno por atracón: Se caracteriza por consumir cantidades exageradas de alimentos en un corto período de tiempo (atracones), sin que la persona pase hambre. A menudo se sienten desagradablemente llenos y se avergüenzan por la cantidad de alimentos que comen.
•Bulimia: Se observan episodios en los que se consume gran cantidad de alimentos en un corto período de tiempo (atracones), seguidos por conductas compensatorias inapropiadas (vómito, laxantes, diuréticos, ayuno o ejercicio excesivo), para evitar ganar peso.
•Anorexia: Se caracteriza por el miedo intenso a ganar peso, estando en un peso bajo lo esperado para su edad y estatura. Evitan comer y se preocupan por la cantidad de calorías que consumen, pueden tomar pastillas para adelgazar, laxantes o diuréticos. Por lo general, piensan que están gordos a pesar de que son muy delgados.
Una persona que tiene un trastorno de la alimentación pude sentirse estresada o molesta por algo en su vida, sentir necesidad de ser perfecto o tener el control, o bien, puede estar reaccionando a la forma en que su cuerpo cambia durante la pubertad.
Al obtener ayuda temprana, se pueden prevenir riesgos asociados a dichos trastornos. Un adolescente con cualquiera de estos desórdenes de alimentación, así como también la familia de éste, necesitan ayuda profesional para superar esta compleja enfermedad.
Con la colaboración de: Carolina Nudman, psicóloga especialista en trastornos alimentarios.