Se trata del Láser de Holmio Moses 2.0, la herramienta más moderna y efectiva en el mundo para procedimientos por agrandamiento de la glándula prostática, una afección muy frecuente a medida que los hombres envejecen.
A partir de los 40 años, progresivamente, todos los hombres comienzan a desarrollar hiperplasia prostática o crecimiento prostático y cerca del 25% de ellos, a los 60 años, presenta síntomas urinarios molestos o problemas
en la vejiga o riñón.
Si bien no todos requieren de una intervención quirúrgica para reducir el volumen prostático, quienes sí la necesitan hoy disponen en Clínica Santa María de una nueva tecnología mínimamente invasiva
y muy efectiva, llamada Láser de Holmio Moses 2.0 (120 Watts). Esta herramienta es única a nivel nacional y cuenta con múltiples beneficios para los pacientes:
- Menor riesgo de sangrado intraoperatorio
- Menos tiempo de hospitalización (uno a dos días)
- Menos complicaciones post quirúrgicas
- Reintegro más rápido a las labores habituales
“La tecnología Láser de Holmio Moses 2.0 permite reemplazar la tradicional cirugía abierta y también a los láseres más antiguos de menor potencia. Esta es hoy en día la mejor herramienta quirúrgica
para resolver esta problemática porque permite que el procedimiento sea un 60% más rápido, por lo tanto, menos invasivo y con menor tiempo para la recuperación postoperatoria en la mayoría de los casos”, comenta
el Dr. José Antonio Salvadó, urólogo de Clínica Santa María.
La incorporación de este nuevo láser, permite al equipo de la Unidad de Urología contar con todas las tecnologías disponibles para el tratamiento prostático benigno, incluyendo: vaporización prostática (láser verde), terapia con vapor de agua (REZUM) y cirugía robótica.
“Para el equipo y la Clínica es una excelente noticia, ya que el beneficio para los pacientes es muy alto, además de que no implica un costo mayor para ellos. Asimismo, permite entregarles un procedimiento eficiente y seguro, para
una afección muy frecuente en los hombres mayores”, destaca el especialista.
Con la colaboración de: Dr. José Antonio Salvadó, urólogo de Clínica Santa María.