Luego de tener a sus dos hijas, y tras evaluar con responsabilidad el futuro de su paternidad, Emilio Escobar optó por la vasectomía.
Emilio, profesor de educación física, se operó en Clínica Santa María para tratar una lesión que tenía en la rodilla derecha. Tras ver los resultados de esta intervención, decidió agendar hora con un urólogo para consultar por la vasectomía, un procedimiento que tenía en mente hace algunos años.
Esta intervención busca la infertilidad masculina permanente, la cual junto con el preservativo, son los únicos métodos anticonceptivos que existen para los hombres. “La cirugía es relativamente sencilla. Se realiza en alrededor de 10 minutos, generalmente con anestesia local y sedación endovenosa. Es de carácter ambulatorio, por lo que los pacientes son dados de alta en un par de horas”, explica el Dr. Pablo Pizzi, urólogo de Clínica Santa María que operó a Emilio.
La vasectomía consiste en hacer pequeña incisión en la piel del escroto, a través de la cual se exterioriza el conducto deferente que transporta los espermatozoides, lo que permite evitar el paso de estos al semen. Esta cirugía no altera la función hormonal, por lo tanto, la eyaculación y erección no se ven afectados.
“Llegué a la clínica en la tarde y la cirugía fue muy rápida. Todo resultó según lo que me comentó el doctor. La atención fue extraordinaria y el postoperatorio sin ningún problema. Estoy muy agradecido y recomiendo totalmente la cirugía y al equipo de especialistas”, menciona Emilio.
Según indica el Dr. Pizzi: “Este caso es muy representativo de los hombres que quieren realizarse una vasectomía. En general, son pacientes que tienen en promedio 32 años y con 1 o 2 hijos, por lo que analizan su situación y estiman que ya tienen su fertilidad cumplida”.
El equipo de Urología de Clínica Santa María está compuesto por especialistas de larga trayectoria profesional, quienes realizan más de 1.000 vasectomías anuales, siendo la cirugía urológica que más ha crecido en el último tiempo.