Existen distintas estrategias y herramientas que permiten mejorar el rendimiento académico de niños y adolescentes. Te contamos cuáles son las medidas más efectivas para facilitar la comprensión y el entendimiento de las materias.
Lugar de estudio
Debe ser en un ambiente cómodo, con una temperatura, ventilación e iluminación adecuada, sin distracciones visuales ni auditivas.
Concentración
Es una de las grandes dificultades entre los niños y adolescentes cuando llega la hora de estudiar. Sin embargo, existen algunas técnicas que permiten lograr un nivel adecuado de concentración:
• Mantener un horario y lugar establecido.
• Planificar los tiempos de estudio y de descanso.
• Evitar estudiar después de ingerir alimentos contundentes.
• Frente a los primeros síntomas de cansancio, se recomienda descansar entre 5 a 10 minutos.
• Planificar los trabajos, no es bueno improvisar.
• Ordenar las materias según su dificultad. Es aconsejable dejar para el final aquello que resulte más grato.
Estrategias de aprendizaje
• Estrategia visual: escribir notas al margen del cuaderno, elaborar resúmenes y cuestionarios, usar destacadores de colores llamativos, pensar en imágenes relacionadas con los conceptos abordados.
• Estrategia auditiva: sentarse cerca del profesor(a) evitando distractores e involucrando todos los sentidos. Estudiar en voz alta.
• Estrategia kinestésicas: elaborar mapas conceptuales, integrarse en equipos de trabajo, formular posibles preguntas y desarrollar sus respuestas.
Junto con estas recomendaciones, es fundamental que los padres guíen y acompañen a sus hijos, especialmente cuando son más pequeños y no tienen la autonomía y responsabilidad necesaria.
Con la colaboración de: Bretta Palma, psicopedagoga infanto-juvenil.