Las bajas temperaturas resienten varias partes del cuerpo, entre ellas las articulaciones, que presentan mayor sensibilidad o incluso dolor a causa del frío. Sigue estos consejos para evitar las molestias.

Generalmente, el dolor de articulaciones en piernas, manos o brazos está relacionado a lesiones o enfermedades que ya están presentes, como artritis, artrosis o tendinitis. Sin embargo, en algunas personas, estas molestias pueden presentarse de manera aislada o intensificarse producto del frío.
Al disminuir la temperatura, los vasos sanguíneos se estrechan y llega menos sangre a los músculos y las articulaciones son más sensibles al cambio de presión barométrica. De esta forma, las articulaciones se vuelven más rígidas y, ante cualquier movimiento, tienen mayor sensibilidad.
Recomendaciones para disminuir el dolor
• Abriga del frío especialmente tus piernas, brazos, manos y cabeza, que son las zonas más expuestas.
• Realiza ejercicios de bajo impacto, como caminatas, para tener buena movilidad articular y potenciar la musculatura, siempre y cuando no exista contraindicación médica.
Ante la presencia de molestias, se recomienda acudir a un especialista para ser evaluado y tratar alguna patología que pueda existir para así evitar complicaciones a futuro.