Desde que la mujer comienza su etapa de desarrollo es importante que se realice chequeos para prevenir problemas ginecológicos a edad temprana como desarrollo puberal anormal, infecciones, irregularidad en la menstruación o diversos cánceres que pueden presentarse en la adultez.

Por esa razón, es necesario conocer cada uno de los exámenes preventivos para hacerlos en el momento que corresponda, sobre todo en la menopausia, etapa en que la mayoría de las mujeres dejan de asistir al ginecólogo y donde se concentran las patologías oncológicas.
Primera visita al ginecólogo
Se sugiere que la primera consulta sea en la adolescencia para entregar orientación sexual o descartar patologías, que muchas veces no muestran síntomas. En caso de existir anormalidades como alteraciones de la menstruación, se debe consultar a la brevedad sin importar la edad.
Papanicolaou o PAP
Se recomienda hacerlo entre los 24 y 64 años, cada tres años. Con este examen se pueden detectar lesiones o la existencia de cáncer cervicouterino, causado por el virus del papiloma humano (VPH). Es una de las enfermedades de transmisión sexual más comunes y en Chile ocupa el primer lugar entre las causas de muerte por cáncer en mujeres jóvenes.
Test VPH
Es un complemento al PAP, tiene más sensibilidad y permite un diagnóstico precoz del VPH, con mayor precisión, determinando si la mujer tiene un tipo de virus de alto riesgo de desarrollar cáncer. Se recomienda a partir de los 30 años porque a esa edad se puede saber si el virus es persistente o no. Si el resultado es positivo, la paciente debe ser estudiada con mayor rigurosidad y, si es negativo, el próximo examen puede realizarlo hasta en 5 años.
Mamografía
Desde los 40 años todas las mujeres deben realizarse este examen para descartar la existencia de cáncer de mama. Aquellas que tengan antecedentes familiares deben realizarlo antes.
Con la colaboración de: Dr. Iván Rojas, médico jefe Servicio de Ginecología, Obstetricia y Neonatología.